Ayer estuve todo el día en la oficina sincronizando el material de mi corto. Sin presupuesto y sin asistente al cual recurrir, el director aperra con todo. Después me junté con mi amigo
K y nos tomamos un par de chelas antes de ir al concierto de las bandas gringas que hicieron la música de "Play". El concierto fue en el cine Normandie y tocaban L' Altra (banda del novio de Alicia, la directora de "Play"), Pulseprogramming y Telefon Tel Aviv. Ninguno de los conjuntos estaba completo, pero ahí se parchaban unos con otros. No sé si fueron las chelas o unas empanadas que me comí al mediodía, pero en la medida que la noche avanzaba me fui sintiendo cada vez peor. Tenía náuseas, me dolía el estómago y poco antes del inicio del último número opté por la retirada en solitario.
Caminando por la Alameda traté de entender algo sobre el mar de cosas que me han arrollado en el último tiempo. No avancé en nada. Es uno de esos momentos en que cuesta entender quién está contigo y quién está en tu contra. El viento nocturno poco a poco me hizo sentir mejor. Y al llegar a Plaza Italia había un cartel con la mejor sonrisa de Bachelet que decía: estoy contigo. Increíble como los publicistas pueden tener sus aciertos. Justo K me había estado contando que Bachelet fue su pediatra cuando niño y algo así como su primera fantasía erótica. Al parecer cuando joven era guapísima. Terminé caminando hasta mi casa en Providencia, igual de confundido que al salir. Al llegar vomité y me fui a la cama. Fue una noche oscura y fresca.
Qué noches esas. Bueno es siempre estar en casa. Aunque sea sintiéndose pésimo. En casa es otra cosa siempre.
salu2
Shidi !
PD: yo me ofrezco de asistente, estoy buscando aprender :P