Nadar
He estado yendo a nadar a la hora de almuerzo últimamente. Me gusta porque a la mitad de la piscina le entra luz de refilón y se ve bonito debajo del agua. Increíble la cantidad de tonteras que uno piensa mientras nada. Me gustaría tener un ipod submarino. Escuché que ya existen, pero parece que baratos no son precisamente.
El otro día vi "Fiesta de Aniversario". De algún modo consiguió encantarme, pero cuando surgían los conflictos profundos de los personajes, me vino una pequeña arcada. Encuentro que Pablo Díaz se parece a Alan Cumming. Una vez lo vi en un corto en Londres donde mataba accidentalmente a un pez tras guardarlo en la juguera durante un apagón (volvía la luz). Lo mejor de las últimas semanas ha sido "La Ciencia del Sueño", sin duda. Soy un fan de Gondry, no hay caso. Qué película tan triste y tan encantadora. También vi algunas de las pelis que traje de mi viaje, "Short Cuts" de Altman entre ellas. Nada que ver con Carver, que es tan contenido y genera atmósferas densas y extrañas justamente porque nada demasiado extraordinario ocurre y a nadie le corre demasiada sangre en las venas si se me permite un texto cursi. Ayer volví a ver "Rosemary's Baby". La vez anterior la vi en VHS y ahora en DVD. Qué cambio, fue como verla por primera vez, ya que todo el rollo más plástico de la peli estaba perdido en el deterioro de los múltiples visionados. No era una cinta nueva.
Otros dos lindos momentos: "Flirting with Disaster" de David O. Russell (el director de "I Heart Huckabees"), una comedia que aún no decide cuando indie quiere ser, pero que le saca brillo a Ben Stiller como un tipo que quiere conocer a sus padres biológicos, y finalmente "Bottle Rocket", la opera prima de Wes Anderson. Qué peli más graciosa. Es divertido que aquí los hermanos Wilson hayan actuado porque no hubo plata para conseguir los actores que querían poner. Así como tantas otras películas parten cuando alguien sale de la cárcel, aquí el personaje sale de una clínica psiquiátrica y a la salida lo espera su buen amigo Dignan que claramente tiene más problemas de salud mental que él. Se proponen ser gangsters, pero no tienen puta idea como hacerla. El gran golpe con delantales amarillos es una ridiculez con Pagoda a cargo de abrir la caja fuerte. Me cae muy bien Pagoda. La peli es imperfecta y termina un poco abajo, pero se deja ver, era que no.
¿Qué hago por estos días? Un montón de cosas, pero aunque a veces corro contra el tiempo, siento que mi principal actividad es esperar. Ver pasar el tiempo que falta para el inicio del rodaje de mi película. Se supone que es definitivo el calendario ahora sí y que partimos en septiembre. La paciencia es una virtud que hay que cultivar en este oficio. Mientras tanto, sigo nadando. Una forma sana de esperar.
El otro día vi "Fiesta de Aniversario". De algún modo consiguió encantarme, pero cuando surgían los conflictos profundos de los personajes, me vino una pequeña arcada. Encuentro que Pablo Díaz se parece a Alan Cumming. Una vez lo vi en un corto en Londres donde mataba accidentalmente a un pez tras guardarlo en la juguera durante un apagón (volvía la luz). Lo mejor de las últimas semanas ha sido "La Ciencia del Sueño", sin duda. Soy un fan de Gondry, no hay caso. Qué película tan triste y tan encantadora. También vi algunas de las pelis que traje de mi viaje, "Short Cuts" de Altman entre ellas. Nada que ver con Carver, que es tan contenido y genera atmósferas densas y extrañas justamente porque nada demasiado extraordinario ocurre y a nadie le corre demasiada sangre en las venas si se me permite un texto cursi. Ayer volví a ver "Rosemary's Baby". La vez anterior la vi en VHS y ahora en DVD. Qué cambio, fue como verla por primera vez, ya que todo el rollo más plástico de la peli estaba perdido en el deterioro de los múltiples visionados. No era una cinta nueva.
Otros dos lindos momentos: "Flirting with Disaster" de David O. Russell (el director de "I Heart Huckabees"), una comedia que aún no decide cuando indie quiere ser, pero que le saca brillo a Ben Stiller como un tipo que quiere conocer a sus padres biológicos, y finalmente "Bottle Rocket", la opera prima de Wes Anderson. Qué peli más graciosa. Es divertido que aquí los hermanos Wilson hayan actuado porque no hubo plata para conseguir los actores que querían poner. Así como tantas otras películas parten cuando alguien sale de la cárcel, aquí el personaje sale de una clínica psiquiátrica y a la salida lo espera su buen amigo Dignan que claramente tiene más problemas de salud mental que él. Se proponen ser gangsters, pero no tienen puta idea como hacerla. El gran golpe con delantales amarillos es una ridiculez con Pagoda a cargo de abrir la caja fuerte. Me cae muy bien Pagoda. La peli es imperfecta y termina un poco abajo, pero se deja ver, era que no.
¿Qué hago por estos días? Un montón de cosas, pero aunque a veces corro contra el tiempo, siento que mi principal actividad es esperar. Ver pasar el tiempo que falta para el inicio del rodaje de mi película. Se supone que es definitivo el calendario ahora sí y que partimos en septiembre. La paciencia es una virtud que hay que cultivar en este oficio. Mientras tanto, sigo nadando. Una forma sana de esperar.